sábado, 29 de marzo de 2014

pero no me digas que sienta nada, si al sentir me siento vivo al tiempo que me muero de la manera más cruel. y no me digas que no sienta nada, pues me mata tu ingenuidad.
más vale no me digas nada, que la traición sea el silencio y su remedio no pensar, que la nada nos transporte nuevamente a la esencia, pues solo el viento secará nuestras mejillas.